Todos sabemos, en teoría, que podemos crear la vida que queremos a través de nuestros pensamientos, sin embargo, la vida que vivimos está generada básicamente por aquellas «órdenes» que recibimos del inconsciente colectivo (la suma de todos los pensamientos y emociones de todo el mundo, en un enorme campo energético en el plano mental de nuestro planeta). Todo aquello que emitimos se acumula en el inconsciente colectivo y es mayoritariamente este, el que sintonizamos a través de nuestro ADN (nuestros receptores y decodificadores de lo que podríamos llamar nuestra «realidad») y en consecuencia lo que manifestamos en nuestro día a día.
Si queremos realmente manifestar la realidad que queremos, debemos aprender a desconectar del inconsciente colectivo que está siendo siempre manipulado por aquellos que tratan de imponernos «su realidad».
«They Live»
El otro día vi la película «They Live», que llevaba en mi lista de cosas por hacer cierto tiempo y me encantó ver de forma tan clara como funciona esa «manipulación» del inconsciente colectivo. A través de la televisión, la radio, todo tipo de emisiones electromagnéticas, es posible influenciar los campos energéticos que todos nosotros recibimos con mensajes (subliminales muchas veces, como en la publicidad) para que nuestro cerebro reciba un tipo de señal y forma de ver las cosas y sea así lo que decodifique y manifieste nuestra mente. Como en la película, se podría desconectar este tipo de influencia externa sobre los pensamientos y emociones de toda la humanidad, pero también es verdad que es más fácil desconectarse a uno mismo individualmente.
Bloqueos y restricciones a la desconexión del inconsciente colectivo
Puesto que quienes pretenden manipular este inconsciente colectivo también saben que podríamos dejar de «sintonizarlo» si fuéramos conscientes de lo que está pasando (los mensajes subliminales no tienen efecto en el subconsciente cuando la mente lógica los conoce, por lo que no tienen poder si uno tiene conocimiento de ellos) se han generado varios bloqueos, emitidos hacia este mismo campo energético al cual todos estamos sintonizados, para que sin darnos cuenta aceptemos ciertas restricciones que nos impidan desconectarnos.
Recordad la entrada que escribí hace cierto tiempo sobre las formas de pensamiento negativas. Básicamente eso es lo que tenemos todos que nos impiden desconectar conscientemente y recuperar el poder que tenemos para crear cada uno su propia realidad. ¿Cuales son esas formas energéticas negativas? Tres en la mayoría de personas.
Humildad, Impotencia e incertidumbre
Nos han hecho sintonizar y creernos (por lo tanto manifestar inconscientemente) que no debemos crear la realidad que queremos porque no podemos ser superiores a otros que no puedan hacerlo (humildad), que no es posible manifestar la realidad que queremos (impotencia) y que es mejor no «tocar nada» no sea que si creamos la realidad que queremos las cosas nos vayan peor (incertidumbre). Estos tres programas negativos están a pleno funcionamiento en la mayoría de nosotros, y luego cada uno tendrá sus otros bloqueos personales dependiendo de sus creencias y forma de entender su mundo.
Para hacer que dejen de tener efecto, simplemente hay que sacarlos a la luz y darle la orden a nuestro Yo Superior de que los elimine y desprograme. Ahora eres consciente de que quizás tienes «eso» funcionando en ti. Tu mente racional lo ha traído desde el nivel de operación de tu mente subconsciente a tu conciencia. Eso ya por sí solo hará que empiecen a dejar de tener efecto. Luego depende de ti que empieces a generar por otro lado pensamientos que se anclen a tu subconsciente (por ahí se hace casi todo el trabajo) de que realmente puedes crear la realidad que deseas, te mereces crear la realidad que deseas y encima puedes estar seguro que cuando crees tu propia realidad, será mucho mejor de la que nos imponen ahora.