Una de las herramientas que, a lo largo de los años, os he ido explicando para poder comprobar la información del blog, para hacer alguna pregunta a vuestro YS o a vuestros guías o para tener certeza sobre algo que nos genera alguna duda, es pedir una confirmación en vuestra realidad a través de alguna señal u objeto. En este artículo tenéis explicado las diferentes técnicas que tenemos a nuestra disposición para todo lo anterior, ya que, es normal que, para según que temas, dudas o situaciones, busquemos recibir información de niveles superiores de nuestra estructura que nos ayuden a clarificar cosas o a comprobar otras.
Como muchos ya habréis experimentado con esto, quizás solo recordar que este mecanismo, usado a nuestro favor, simplemente consiste en solicitar un objeto, “algo”, en nuestra realidad, si lo que queremos saber es correcto desde el punto de vista de nuestro YS, y otro objeto distinto si lo que queremos saber no lo es. Y para los que seáis más detallistas, un tercer objeto si queréis preguntar si algo es parcialmente correcto o no del todo correcto, pero no es falso. Como nada suele ser blanco o negro en la realidad, a veces aquellos que nos asisten usan esta tercera opción cuando quieren ser “estrictos” en sus respuestas y aun asi intentar guiarnos lo mejor posible sin liarnos más de la cuenta.
El mecanismo, por lo tanto, funciona simplemente así: “Solicito a mí YS y a mis guías que si el concepto XXXX es correcto me muestren el objeto tal en mi realidad de forma nítida, clara e inequívoca”. Lo mismo para el concepto de “no correcto” o para la opción de “es más o menos así pero no del todo así”. Luego, simplemente, a lo largo de vuestro día a día se trata de prestar atención a nuestro mundo y dejar que vayan apareciendo las señales y, con el tiempo. esto se convierte en una “brújula” básica y un mecanismo sencillo para ir comprobando cosas que queramos saber.
¿Cómo lo hace el YS para mostrarnos esos objetos?
En realidad, somos nosotros los que nos mostramos a nosotros mismos las respuestas, que han sido insertadas previamente por nuestro YS en nuestro cuerpo mental. Es decir, si tú ves algo en tu realidad, es porque tú lo has proyectado. Y si tú lo has proyectado, es porque está contenido y en forma de “paquete de datos” en tu cuerpo mental. Por lo tanto, si has pedido un bote de mayonesa azul con una tapa verde como objeto a ver cuándo algo es “correcto”, para que tu YS pueda mostrarte ese elemento y tú lo percibas de forma nítida y clara, ese paquete de datos “bote de mayonesa azul” tiene que ser creado mentalmente e insertado como ”onda” en tu capa preconsciente del cuerpo mental, que es la que, junto con el subconsciente, se usa para el almacenamiento del contenido que luego vas a proyectar como parte de tu realidad.
Así, por lo tanto, cuando tú le pides a tu YS que te muestre tal objeto si “eso” es correcto, o tal otro si eso no lo es, tu YS inserta el objeto (su imagen mental) en tu banco de datos de “cosas a proyectar” y, cuando tu solicitas una comprobación, tu YS, literalmente, mueve el paquete de datos que contiene el objeto al interior de la onda proyectiva para que “salga” hacia el exterior y, manteniendo la coherencia respecto al resto de cosas que están siendo emitidas, “eso” aparezca por aquí o por allá como parte de tu realidad, dándote la confirmación o respuesta a tu pregunta y sirviendo entonces como mecanismo básico de comunicación y comprobación de temas sobre las que queremos que nuestro YS nos dé una respuesta.
¿Funciona siempre para todo el mundo?
Por lo tanto, el mecanismo es sencillo. Tu YS no crea el objeto directamente en tu realidad porque la única forma de crear tu realidad es pasar a través de tu sistema mental para ello. Así que tu YS, tus guías, o los seres que te asisten, lo que hacen es darte a ti el contenido de las respuestas para que tú mismo la proyectes cuando tu YS reciba tu pregunta y, entonces, active el mecanismo para que tus programas de proyección del mundo “exterior” recojan ese elemento y lo incorporen al holograma de tu vida con el resto de información que forma parte de esta.
Claro, por otro lado, hay montones de veces que pedimos el objeto, la señal o la respuesta y esta no llega de ninguna forma, no la vemos, no aparece. ¿Por qué sucede esto? ¿No sería algo tan simple como emitir el molde “mental” del bote de mayonesa, pasarlo al etérico y luego verlo manifestado en el plano físico?
Es correcto, es un proceso muy simple y que funciona bien en casi todas las ocasiones, excepto, como ya podéis imaginar, cuando hay “interferencias” en las ondas de proyección y el paquete de datos que contiene el bote de mayonesa se sobrescribe, “sin querer”, por otros paquetes de datos y, entonces, no llega a completar el proceso de manifestación de forma correcta.
¿Por qué se sobrescriben paquetes de datos de mis ondas proyectivas?
Habíamos explicado en artículos anteriores la diferencia entre imaginación y fantasía. La realidad se crea a partir del mecanismo de la imaginación, literalmente. Cuando yo proyecto mi vida, se usan los arquetipos, yoes y programas que trabajan con la imaginación para formar la realidad mental que luego se materializará como la realidad física a través de los moldes y plantillas de mi realidad etérica. Por lo tanto, todo lo que existe ha nacido de los procesos y mecanismos mentales de la imaginación, y esta incluye todo lo que tenga que ver con ideas, pensamientos, visualizaciones, creencias, conceptos, etc. Sin embargo, hay decenas de miles de cosas que imaginamos pero que no podemos materializar, porque no están acorde a las leyes del paradigma que forman el mundo “material” bajo el que vivimos. Es decir, si el contenido del paradigma de la humanidad no tuviera unos parámetros que dijeran que esto se puede materializar y esto otro no, la realidad en la que existiríamos tendría otras reglas y otra configuración, como la tiene para Neo y Trinity, por ejemplo, en la peli Matrix, el mundo “dentro de la Matrix” para los humanos, pero no para ellos, que no llevan en sus proyecciones mentales las mismas reglas del juego que el resto. Así, nuestros mecanismos de imaginación tienen que discernir, de todo lo que tenemos en el cuerpo mental, qué es lo que realmente se puede pasar del plano mental al plano etérico y luego del etérico al físico.
Para ello, existen miles de programas que comparan con las bases de datos de las esferas mentales y del cuerpo mental en varios niveles de programación si ese paquete de datos puede ser emitido y creado como parte del holograma “sólido”, físico y material, y, si por la razón que sea, la programación de la propia persona no lo cree conveniente, ahora veremos por qué, entonces ese paquete que contiene el bote de mayonesa azul se descarta catalogándolo como fantasía, que es el mecanismo de destilación de la mente para aquello que ha sido imaginado pero que no hay manera de que forme parte del mundo “real” en el que entendemos que existimos.
Por lo tanto, la fantasía es simplemente todo el contenido de la mente que no es posible hacer bajar al plano físico, porque es eso, “fantasía”, no es real, pero no es real porque hay unos parámetros en nuestra programación que indican que eso no puede ser real en nuestro mundo, no porque no pueda ser real en ningún sitio. Es decir, la fantasía son desechos de la imaginación que aquí no se pueden proyectar, pero tuviéramos otras reglas y otra programación, esa fantasía podría caber perfectamente dentro de lo “normal” para todos nosotros en nuestra realidad común.
Bien, entonces. ¿Por qué mis paquetes de datos solicitando respuestas a mi YS a veces se descartan como fantasía? Principalmente porque hay partes de nosotros que no creen que “eso” se vaya a poder manifestar de verdad. Es decir, tu YS siempre va a activar la emisión del paquete de datos con la respuesta que le has pedido, nunca deja de intentar ayudarte y lo hará tantas veces como pueda, algo así como una máquina de lanzar pelotas de tenis que la pones en automático y empieza a lanzar una tras otra con la esperanza de que alguna de ellas cruce al otro lado de la pista. Pues algo así con las respuestas que estás esperando, tu YS activa una y otra vez el mecanismo de insertar en la onda proyectiva el paquete de datos con el bote de mayonesa, pero, dependiendo de la estructura y programación de cada uno de nosotros, a veces sobrescribimos ese paquete de datos tantas veces como se inserte, porque automáticamente, cada vez que aparece en la onda de proyección, se cataloga como fantasía, y cada vez se descarta en el proceso de bajarlo al plano etérico y luego al físico.
¿Qué puede hacer que cataloguemos como fantasía las respuestas del YS o de nuestros guías?
Principalmente nuestro sistema de creencias. Es decir, uno puede estar deseando comunicarse con niveles superiores, con el YS, con guías espirituales, pero en estratos de la psique de los que quizás no somos conscientes, estamos literalmente convencidos de que este tipo de cosas no son más que tonterías, ideas que no tienen base real alguna o algo que literalmente no tiene sentido desde ese punto de vista que “sea así”. La percepción de que la realidad es sólida e inmutable está tan arraigada en nuestra programación, que, a niveles interiores de esta, le choca que, entonces, se puedan poner o quitar elementos de esta “por las buenas”. Si yo puedo ver un bote de mayonesa con una tapa verde porque así lo pido, ¿Por qué no puedo ver otras cosas que realmente tienen un valor mayor o me harían más falta?
Porque nosotros mismos no nos lo creemos que podamos hacerlo. No nos creemos que podamos manifestar la realidad y no nos creemos que solo sea un holograma energético por muy sólido que lo percibamos. Pero lo malo es que no es una parte de la personalidad superficial y externa la que no se lo cree, de hecho, esta parte nuestra que hace la petición al YS es la que más ganas tiene de ver ese objeto manifestado en la realidad para recibir respuestas y comprender el mundo en el que vive, sin embargo, esta parte “exterior”, estos yoes que son los que usamos para gestionar el mundo que proyectamos, no son los que están bloqueando desde estratos más profundos ese mismo mundo con la creencia de que no es posible recibir señales de algo que no ves, algo que no estás seguro que exista o algo que, si realmente te puede responder así, entonces no cuadra con todo lo que hemos aprendido a lo largo de múltiples existencias sobre cómo funciona el mundo en el que vivimos.
Por lo tanto, este cortocircuito interior forma parte de lo que hace muchos años llamábamos la programación cruzada. Quiero, pero no quiero, me lo creo, pero no me lo creo, pienso que se puede, pero estoy seguro de que no se puede. Es programación contradictoria que todos poseemos en centenares de pares de programas y que anulan, literalmente, y sobrescriben, los paquetes de información que salen en la onda proyectiva que es la que da contenido a tu realidad cada instante.
Al anularse mutuamente los procesos de manifestación de estas señales, otros programas recogen estos paquetes de datos que han sido catalogados como fantasía por los yoes que forman parte de nuestros sistemas de creencias más profundos y entonces se desecha la manifestación de esa respuesta o señal y, por mucho que estemos mirando por todos lados a nuestro alrededor, no percibimos ese objeto, ni ningún otro, de los que hemos solicitado para comprobar esto o lo otro.
Reduciendo la interferencia e incrementando el potencial del mecanismo de señales
En todo caso, como todo tiene solución, y ahora que ya hemos explicado el funcionamiento y espero que se comprenda al menos de forma genérica, se puede trabajar con el YS para cambiarlo, al menos en algunos aspectos, y con ello se mejore el uso de esta herramienta de comunicación con nuestro YS. Lo que vamos a hacer, o podéis hacer si quereis, es crear una petición o usar la que os pongo a continuación, que aumente la jerarquía de los paquetes de datos insertados por el YS en vuestro mecanismo de proyección para que no pueda ser descartado como fantasía por los yoes proyectivos. Es decir, cuando todos los paquetes de datos con el contenido de la realidad son emitidos por la glándula pineal, si tienen el mismo grado de importancia pues se desechan los que estén catalogados como fantasía y listo. Pero si algunos paquetes de datos tienen un código diferente que alta prioridad, ya ni siquiera se permite que los yoes proyectivos comprueben su contenido para ver si está acorde al paradigma o no, de manera que están obligados a incluirlo en la onda proyectiva y a mantenerlo en la misma sin alterarlo.
Es posible que algunos yoes internos, si realmente hay un fuerte rechazo a todo este tipo de cosas (muchas personas están interesadas en estos temas, por ejemplo, pero en su interior no creen que nada de esto sea real, aunque realmente sea muy muy dentro de su sistema de creencias), intenten frenar la emisión de estos paquetes de alta prioridad del YS, porque intuyen lo que hay dentro, y eso podría romper algunas de las creencias básicas de la persona. Pero, en todo caso, el primer paso para ello pasa por pedirle a nuestro YS que, cuando le hagamos una pregunta y pidamos la respuesta a través de una señal, esta respuesta se emita con códigos de alta prioridad que minimice la posibilidad de que sean descartados. Luego, ya poco a poco iremos viendo cómo eliminar las partes del sistema de creencias más arraigadas en cada uno de nosotros sin peligro de que ello nos cause una crisis existencial ni nada por el estilo.
La petición que podéis usar o adaptar es esta:
Solicito a mi YS y le doy permiso para que inserte en mi sistema energético y cuerpo mental sus respuestas a mis peticiones y solicitudes de comprobación de aquellas dudas y preguntas que tengo con paquetes que lleven los códigos de alta prioridad y que reajuste los mecanismos de proyección de mi realidad para que estos paquetes sean emitidos y entren en los procesos de manifestación sin ser alterados, borrados o desechados. Solicito que se ejecuten los cambios necesarios a mis parámetros de proyección de la realidad para poder mejorar este mecanismo de recepción de respuestas y se eliminen, borren y desprogramen los topes, filtros, limites, yoes, programas y rutinas que alteran o causan discusión en el funcionamiento optimo del mismo. Gracias.
La petición pues la hacéis una o dos veces al día durante algún tiempo hasta que veáis si, a medida que vais pidiendo respuestas a través de señales y objetos en vuestra vida, estos empiezan a aparecer de forma más clara, rápida y sin mayores alteraciones. Con ello, pues ya es más fácil ir obteniendo respuestas a cosas que queramos ir comprobando para seguir aprendiendo cómo funciona el mundo que no vemos.