Hemos dejado pasar unos días para dar tiempo a que se finalice la creación del “aislante” energético que, hemos comentado anteriormente, se estaba instalando entre la realidad de REC y la nuestra.
Ahora, con este trabajo ya finalizado y operativo, vamos a poder disminuir el efecto que el desfase de ciclo y reversión del biorritmo evolutivo de asimoss podría llegar a tener sobre nosotros, pues, definitivamente, lo han empezado a poner “en contrafase” al nuestro. Eso, como explicábamos hace un par de artículos, podría llevar a la anulación de los propios ciclos de crecimiento de la humanidad, convirtiendo nuestro “camino” como especie, en un flujo “plano”, sin crestas ni valles, algo que quizás a primera vista no pudiera parecer tan “malo” o tan extraño, pero que iría en contra de todo el resto de biorritmos que rigen cualquier sistema vivo y consciente, y que necesita de las interacciones entre ellos, tanto cuando están “subiendo” para apoyarse y sumar energías en algunos aspectos, como cuando están “bajando” y requieren de mecanismos para regular los descensos.
Una vez más, esto puede seguir resultando abstracto y confuso. No hay ninguna manera objetiva de medir este biorritmo evolutivo de la humanidad, no hay manera objetiva de especificar el impacto que una curva ascendente tiene en nuestro día a día a nivel individual o que una curva descendente tiene en lo que nos pasa en nuestra vida. Y es correcto, porque son ciclos globales, muy alejados de lo que cada uno de nosotros podría analizar en retrospectiva u observando los sucesos de su realidad particular. Aún así, necesitamos aprender de su existencia y de su funcionamiento, pues lo que nos pasa como “humanidad” depende directamente de este ciclo y, si el flujo de energía sobre el que se asienta, que es el ciclo evolutivo asimoss como ya hemos explicado, se coloca “al revés”, en contrafase, nuestro propósito, camino y avance como sociedad se paraliza casi por completo. De nuevo, aunque quizás no haya forma de poder medir esto desde el punto de vista “normal” por observación de los hechos a pequeña escala, la importancia que tiene a nivel macro es fundamental.
Dejemos pues ya estos procesos tan amplios y volvamos a temas más cercanos a nuestra realidad y día a día, ahora que ya conocemos su existencia, su funcionamiento, su impacto en nosotros y la situación en la que han quedado, al menos hasta que no se advierta o perciba algún nuevo intento por parte de REC de alterarlos de nuevo.
Así, para revisar la situación de algunos de los puntos principales que analizamos en nuestro último checklist de Noviembre, veamos cómo se han actualizado dos de los más importantes:
Cambios en la estructura económica global a nivel energético
Están «casi listos», desde el punto de vista de REC, todos los cambios que querían ejecutar. De aquella estructura que os diagramé hace algún tiempo, solo les quedan por cambiar unas pocas «tuberías» en el plano 1.3 de la estructura del planeta. Este nivel es lo que nosotros veríamos como el plano «virtual» donde “existe” nuestro software que, aunque decimos que es algo «físico» (por estar en un ordenador, CD o memoria USB “material”), no deja de ser un «intangible» que está en formato de paquetes de datos y sistemas virtuales, y por ende, “alojado” energéticamente en el sub-nivel 3 de la estructura físico-energética de la Tierra. Todo lo que nosotros llamamos “la nube”, energéticamente se encuentra en el plano 1.3.
Por lo tanto, la nueva estructura causal, mental, etérica y la físico-energética que asimoss llevan desde Diciembre del 2019 «cambiando» y sustituyendo, para convertirla en una enorme «red» con características blockchain, ha sido casi completada. Cada nueva restricción económica que se ha ido implementando en los últimos meses en diferentes partes del planeta ha permitido, como ya habíamos explicado, disminuir la corriente en las «tuberías» que transportan el flujo de la energía que la humanidad genera en cada transacción monetaria que realizamos. Al haber mantenido la economía del planeta bajo mínimos todo este año, han podido hacer este trabajo de sustitución que ya tienen casi completo. Aún tienen que hacer el cambio final de sistemas, para que sus «mecanismos de conversión energética» pasen a trabajar con esta nueva red de tuberías y deje de hacerlo con los remanentes de las estructuras «antiguas» que han estado activas hasta ahora.
Os animo a revisar la serie de artículos sobre el tema, desde la primera a la quinta parte, donde tenéis los diferentes diagramas y mecanismos que REC usa para ello, más explicados y detallados.
De nuevo, para una persona a nivel individual no ha habido ningún cambio, sigues pagando con tu tarjeta, tu móvil o tu cuenta online en el banco, pero, a nivel energético, el cambio es enorme, pues REC empieza a encriptar todas las transacciones según el modelo de las “criptomonedas” actuales, y los paquetes resultantes les proporcionan mucha más capacidad y potencia energética para gestionar sus ciudades, sistemas, centros operacionales, etc. Puesto que nuestra sociedad, a nivel «físico», no usa aún el sistema “criptoeconómico” a gran escala, sino un sistema bancario «digital» (que no es exactamente lo mismo), la mayoría del dinero que usamos no es tangible, solo números en una cuenta bancaria o una app del móvil y, por lo tanto, es virtual y digital, pero tiene una estructura diferente a la de las criptomonedas como el bitcoin o las demás.
Correlación del precio cripto- vs dólares
Para medir “cuánta” energía pueden extraer de un paquete “cripto”, han usado la medida de “dinero” del dólar americano como unidad base, de forma que, una unidad de energía “cripto”, equivale a 1USD para nosotros. Alterando, haciendo pruebas con la tecnología etérica, mental y causal, van viendo y ajustando los parámetros de conversión, de forma que, cuando el bitcoin, por ejemplo vale 30000 USD, eso significa que asimoss obtienen 30000 unidades de energía por cada transacción cripto que pasa por las nuevas tuberías.
Puesto que este flujo es intermitente ahora y está en proceso de ajuste, la volatilidad de las criptomonedas es enorme según los parámetros de energía asignados que cada paquete “cripto” pueda “llevar” en el ciclo de conversión que va desde el nivel “virtual” del plano 1.3 hacia el etérico, de ahí al mental y de ahí a las “turbinas” de conversión hacia la red “energética” de asimoss. Si necesitan más energía, el btc y las demás criptomonedas “suben” de precio, pues tienen que meter más “unidades de energía” en el mismo paquete “cripto-económico”. Si están operando “normalmente” y no quieren forzar sus sistemas, bajan las unidades de energía que necesitan hacer circular por las tuberías y, entonces, la correlación con el número de unidades monetarias (en dólares) baja, y nosotros lo vemos como una caída del precio de btc vs el dólar.
A nivel tecnológico, hay muy pocas transacciones “cripto” respecto al total de transacciones monetarias de toda la humanidad, de forma que para seguir usando las transacciones económicas “digitales” pero obtener de ellas la energía casi “ilimitada” que les proporciona las transacciones “cripto”, REC ha implementado un «conversor» en este plano 1.3, para que la energía de cada transacción «digital» de dinero (las físicas en cash no les genera ningún beneficio), sea convertido en transacción «cripto» (de nuevo, en los niveles superiores de la estructura económica del planeta) y, de ahí, es de donde ya usarán, en algún momento, tras el cambio de sistema que quieren hacer a la nueva red, los nuevos mecanismos como fuente de alimentación para sus ciudades, bases operacionales, etc.
Como en unas semanas parece que terminarán lo que les queda por acabar respecto a las últimas “tuberías” aun en proceso de sustitución, es de esperar que ya no necesiten más «excusas» para mantener a la humanidad semiconfinada y, (esperemos), dejen disiparse la realidad «pandémica» actual por completo que ya ha cumplido (para REC) su propósito.
Petróleo y desplazamientos
Sin embargo, para SC la cosa es distinta. Si hace un par de meses hacíamos una lista de todos los objetivos que REC y SC tenían en mente conseguir con esta situación que llevamos viviendo desde finales del 2019, quizás recordéis que uno de los puntos de este «confinamiento» y reducción de la movilidad era para evitar el «gasto» de petróleo que no pueden «sustituir», porque el propio planeta está drenándolo hacia su interior. De esto ya hemos hablado en varias ocasiones a lo largo del año 2019. Nuestro logos tomó la decisión de filtrar todo el petróleo hacia el interior de su estructura donde la tecnología actual que poseemos no pueda extraerlo, eliminando así la principal fuente de conflictos, luchas de poder, guerras e invasiones, contaminación planetaria, daños y desastres ecológicos, etc.
En estos momentos, hay aproximadamente 5 años de reservas de crudo «fuera de las bolsas«, es decir, almacenadas en superficie, al ritmo de consumo que tenemos en este enero 2021. Esto quiere decir que, si las restricciones terminan por disiparse paulatinamente a lo largo de este año, y, para finales del 2021 o inicio del 2022 empezamos a movernos, viajar, coger los aviones y transportes, etc., al mismo ritmo y uso que llevábamos en noviembre 2019, en menos de dos o tres años no tendremos ya petróleo «almacenado en superficie», fuera de las bolsas de crudo que tenemos localizadas.
Existe diferencia entre lo que los países productores llaman «reservas confirmadas» y el almacenamiento en superficie. Las «reservas confirmadas» de petróleo son las bolsas que no hemos extraído aún, pero que están muy cerca de la superficie, fácilmente extraíbles, sin mayores problemas para las petroleras y que «dan por hecho» que las tenemos disponibles. Esas reservas son enormes, siempre y cuando no se «drenen» hacia el interior del planeta, que es lo que empezó a suceder en el 2019, y que ha seguido, y sigue, a un ritmo rápido en estos momentos. Este ritmo se ha acelerado por la orden de la anterior administración americana de permitir perforaciones en el ártico (orden ahora ya cancelada por el nuevo gobierno) y por el “descubrimiento” de reservas en Guyana, Surinam y la costa de Brasil.
Estos yacimientos ya eran conocidos por las grandes petroleras, pero se mantenían intactos por los costes que tenía y porque no era necesario hasta entonces perforar en ellos. Como las diferentes fuerzas y jerarquías de asistencia logóica han visto y monitorizado que SC busca sacar a superficie tanto petróleo como sea posible antes de que se «drenen» del todo las bolsas más accesibles, se están dando «descubrimientos» de yacimientos por doquier, como los citados, en estos últimos meses, y hay una carrera por perforar y extraerlos lo más rápidamente posible. A finales del año pasado vimos también a buques turcos explorando zonas disputadas del Mediterráneo a Chipre y Grecia precisamente porque, Turquía, intentar tener, por sí misma, más reservas de hidrocarburos (en superficie) antes de que se “cierre el grifo” (algo que solo saben muy pocas personas en el “top” de las élites políticas y económicas y que pertenecen ellas mismas a SC).
Una transición acelerada hacia energías renovables
La transición hacia un modelo de energías renovables aún dista de estar en una fase que nos permita sustituir nuestra estructura por completo, dejando de lado el petróleo y sus derivados. Por ello, este mes pasado, los niveles más altos de SC, dieron la orden a miembros del nivel 6 de entregar nueva tecnología para el desarrollo de energía solar a una rapidez inimaginable en años anteriores, que puedan proporcionar un sustituto en menos de 5 años a las necesidades energéticas que la humanidad posee.
Esta tecnología ha sido entregada por asimoss y permitirá el aprovechamiento de la energía solar a un nivel tremendamente mayor que el actual. Esto significa que van a producirse enormes «descubrimientos» y desarrollos en el área de las energías renovables, principalmente solar, en pocos años, que permitirá «salvar la cara» al sistema de control y hacer una transición acelerada de un mundo de energías no renovables a una sociedad basada en estas, al menos hasta un mínimo grado que permita no crear ningún tipo de disrupción en la psique colectiva y todo se perciba como un avance simplemente “espectacular” de lo que la humanidad ha conseguido.
Es básicamente lo mismo que ha pasado con las vacunas, han conseguido crear una vacuna en 9 meses porque los mismos que diseñaron el virus ya tenían los mecanismos para contrarrestarlo, de forma que, entregándolo en forma de «descubrimiento científico» (tanto directamente hacia la psique de los investigadores y científicos como hacia los directivos de las empresas trabajando en ello) y acelerando la ayuda que se proporciona a las farmacéuticas de forma indirecta, se puede hablar de un «milagro» de la ciencia y la tecnología de la humanidad. Lo mismo pasará con el tema del petróleo y el cambio a un mundo más sostenible, pues Kumar ya no da marcha atrás y drena hacia el interior de sí mismo todo el petróleo de superficie a la máxima velocidad que los mecanismos de absorción de la Tierra le permiten.
Minimizar el consumo, reducir la movilidad
En todo caso, SC necesita minimizar la movilidad de las personas hasta un nivel que sea aceptable “sin llamar la atención”, con lo que se va a seguir fomentando todo lo que sea “remoto” (teletrabajo, comprar online en vez de ir físicamente, clases remotas en vez de presencialmente, etc.). Esto es debido a que, cuanta menos gente coja el coche, el metro, el bus, el tren, barco o avión, menos combustible se usa de las limitadas reservas mundiales existentes “en superficie”, así que es de esperar que se consiga implantar un modelo de “todo lo que se pueda remoto” y, lo que no, presencial como siempre pero desincentivando la movilidad lo que les sea factible sin llegar a implantar leyes, confinamientos y demás (pues ya, una vez desaparezca la realidad pandémica, estas no tendrán sentido ni anclaje posible para sostenerse en la psique colectiva, algo que aún todavía si tiene y siguen reforzando con nuevas variantes y mutaciones del virus).
De momento es cuestión de seguir lidiando en el día a día con la realidad “base” que SC ha impuesto a la mayoría de la población, esperando que todas las peticiones que tenemos en marcha para ello os estén ayudando a no sintonizaros (tanto) con ella, y a mantener un buen estado energético en todos los sentidos. En los siguientes artículos entraremos en otros temas que también es necesario conocer y aprender a la vez que vamos monitorizando cualquier cambio que se pueda producir en todos los procesos que están en marcha.