Respecto a los temas de protección energética, que tratamos con más detalle en el nivel 3 de DM y SE, creo que es conocido por todos que existen diferentes formas geométricas y técnicas para incrementar nuestra protección «activamente», pues nos podemos colocar en alguna situación complicada a nivel energético en la que podamos estar «escudos» y «bloqueadores» que limiten la interacción externa con el entorno.
Así que vamos a dar algún pequeño consejo sobre cómo potenciar el uso de la más común, la «burbuja de luz» como todos solemos llamarla, para que se pueda usar y quitar según necesidades.
Toda «burbuja» que visualicemos alrededor nuestro o que pidamos a nuestro Yo Superior que nos coloque como protección necesita energía para mantenerse robusta y sin que pueda ser atravesada, de lo contrario, los primeros 10 minutos la protección será muy fuerte si hemos hecho una buena visualización o hemos hecho la petición adecuada, pero, a la media ahora, si esa burbuja no tiene una fuente de alimentación constante va perdiendo fuerza y robustez y se termina disipando cuando toda la energía de las partículas que la forman se termina «diluyendo».
Por lo tanto, hemos de «enchufar» nuestra burbuja a «algo» que la mantenga fuertemente «cristalizada» alrededor nuestro (sin que se convierta en el bloqueo de «espejo de luz» del segundo nivel de DM y SE) y que luego podamos deshacer con facilidad cuando ya no sea necesario.
¿Y dónde enchufamos la burbuja?
Ni más ni menos que a nuestro propio cordón dorado, que, como sabéis es un eje energético que, desde el Yo Superior, nos atraviesa y nos conecta con el propio núcleo energético del planeta. Por lo tanto, es como un cable de alta tensión, siempre circula energía por el cordón dorado, y con la petición siguiente podemos pedirle a nuestro YS que alimente desde su propia energía la burbuja de protección enchufándola al cordón dorado mientras sea necesaria.
Como una petición muy larga seria muy difícil de recordar cuando estáis fuera de casa o simplemente no tenéis vuestros apuntes a mano, en este caso bastará con recordar algo así como:
«Solicito a mi Yo Superior y le doy permiso permanente para que instale una burbuja de protección alrededor mío y la enchufe a mi cordón dorado para mantenerla activa todo el tiempo que sea necesario hasta que salga de este lugar, espacio, hasta que llegue a casa, hasta que termine lo que estoy haciendo…etc. Gracias».
Con ello, vuestra protección se incrementa exponencialmente en todos los sentidos y confío en que os sintáis mucho más tranquilos y relajados por mucha alteración energética que se mueva a vuestro alrededor.