El mundo está cambiando rápido y hay mucha sed de conocimiento y de respuestas a las preguntas que nos atormentan cuando uno se ve envuelto en el camino de la evolución personal y espiritual, o, como decía una lectora a través de Facebook, de ver cómo se despiertan verdades en nuestro interior cada vez más rápido y cada vez de forma más seguida.
Se que hay muchos de vosotros que cuando me enviáis emails con preguntas o con vuestros comentarios estáis deseando poder contar al mundo vuestra visión de la vida y de las cosas que estáis percibiendo últimamente. Y es que, poco a poco, todos estamos queriendo encontrar el canal de expresión que permita dar salida a nuestras inquietudes espirituales.
También se que para muchas personas, hacer «público» su interés por ciertos temas puede chocar con su entorno personal, y eso «corta» a la hora de discutir ciertas cosas, de hacer preguntas, de tratar de juntarse con otras personas que piensen lo mismo que tú, etc. Pero en cierta forma, tarde o temprano, hay que salir del armario.
¿Qué dirán?
Entiendo perfectamente el dilema. ¿Cómo voy a contarles a mis amigos que estoy metido en rollos de chakras, de viajes astrales, de meditaciones, de investigaciones sobre extraterrestres, de conexión con guías y espíritus, del trabajo con las energías universales, de reiki, de vidas pasadas, de lectura de archivos akáshicos, etc., etc? Bueno, pues quizás te sorprenderías si lo hicieras, y encontrarías mucho más apoyo del que crees tener en estos momentos. Existe tanta gente interesada en estas cosas, que piensa que los demás no lo están, que se guardan sus conocimientos, opiniones y experiencias con tal de no ser catalogado como «rarito», por lo menos. Lo curioso es que, de repente, estás cenando con amigos o familiares, sueltas algo de estos temas casi sin darte cuenta, y ves como todo el mundo se muestra interesado o incluso conoce al respecto. Creedme, he pasado por ahí.
Necesidad de transmitir y de compartir
El mundo entero necesita que todos los que buscamos respuestas sin parar, compartamos nuestras experiencias y salgamos del armario, de una vez por todas. A mi me encanta escribir, es una pasión, y por eso tengo este blog, pero todos vosotros podéis transmitir lo mismo que intento transmitir yo de la forma que resuene con vosotros. Nadie adopta la postura del maestro o del gurú que todo lo sabe, aquí todos aprendemos. Cada post de este blog es una experiencia vivida, integrada y luego explicada por si a otro ser le puede ser de utilidad. Cuanto más interactúas con el resto de personas que andan en el mismo tipo de camino, más rápido evolucionamos todos.
Dos formas de compartir y evolucionar: desvelar información
Yo considero que tenemos dos formas de transmitir información para que otros empiecen o encuentren apoyo en su camino «evolutivo» y «despierten». El primero es la divulgación de los que realmente está pasando «ahí fuera». El proceso de difundir información es vital para abrir nuestra mente a otras posibles «realidades», para no creernos todo lo que nos venden por la tele y para entender que muchas veces estamos siendo manipulados para el beneficio de unos pocos. La información en este campo es brutal y apabullante cuando te metes, y no hay que creerse todo, pero si que hay que ser capaz de estar abierto a que otras posibles interpretaciones pueden ser ciertas.
Elevar la conciencia / promover la evolución personal
La segunda forma es trabajar mucho en todo aquello que pueda resultar en una ayuda para que otros avancen en sus caminos. Es más o menos la línea que sigo yo, pues aunque estoy muy tentado siempre de dar a conocer noticias y cosas descubiertas por otros, creo que hay un magnífico número de blogs y páginas que ya difunden bien toda esa información. Esta otra línea trata de complementar a la primera, y su misión es la de apoyar el trabajo personal de cada uno con experiencias, sugerencias y prácticas. Ambas cosas son necesarias, y si te sientes tentado a salir al mundo y unirte a alguna de estas líneas de trabajo, la humanidad te lo agradecerá.
Cuanto más te adentras en tu propio camino más información recibes, y más ámbitos de investigación se abren. Si quieres caminar más rápido, sal del armario, da a conocer tus intereses e inquietudes, y empezarás a atraer hacia ti todo lo que necesitas, y a quien necesitas, para acompañarte en este estupendo camino de evolución espiritual. Nos vemos en la siguiente parada.