En decenas de artículos en el blog he hablado anteriormente de los caminos evolutivos, la dualidad, las polaridades, existentes en este juego de la creación en el que existimos y la confrontación siempre, desde nuestro punto de vista, entre lo que llamamos “positivo” y lo que llamamos “negativo”.
Vamos a tratar el tema de nuevo desde un punto de vista un poco más metafísico, para poder comprender que estas etiquetas son solo designaciones desde nuestra perspectiva sobre el efecto que vemos de ambas polaridades, pero que tienen una razón de ser mucho más allá de ser algo “bueno” o de ser algo “malo”.
La creación “real” y la creación “ilusión”
Tenemos que pensar que todo lo que existe, esto que llamamos “la Creación” a falta de mejor nombre, es una “ilusión” diseñada intrínsecamente y detalladamente para que proporcione a cada parte de los que estamos en esta “creación” una forma de conocer todo lo que existe en ella a través de la experiencia directa, y así, que esta “creación”, en su totalidad, crezca y se retroalimente a si misma con las experiencias que cada parte de si genera. Decimos que es una “ilusión” porque no tenemos otra forma de describir la separación de la conciencia de inteligencia infinita que es el “TODO” de las partes que al “independizarse” ganan autoconciencia de su separación de ese TODO. Así, lo que seria “real” seria la integración con la energía de la Creación, lo que seria ilusorio, seria el proceso de separación y vuelta a ese TODO. Aquello que es “real” está por encima del pensamiento, de la mente y de la compresión de nuestra conciencia.
La parte expansiva y la parte que se contrae
Dentro de esta “ilusión” del juego de la existencia, existe aquella parte energética que es positiva o radiante, que se expande al crecer, y aquella parte energética de la misma ilusión que es negativa o magnética, que se contrae para evolucionar y aprender. Una parte percibe la creación como un juego de expansión, la otra como un juego de contracción y atracción.
Esto, para nosotros, son los conceptos de dualidad, y de polaridades, que se mantienen en tensión y en balance, sustentándose la una a la otra, manteniendo la misma ilusión de la existencia en pie, para que pueda ser utilizada como herramienta de crecimiento y servicio.
A lo largo de los diferentes niveles evolutivos y a lo ancho del universo, ambas energías, la que radia y la que contrae proporcionan los dos caminos que pueden ser escogidos por cualquier entidad para volver de vuelta a la unión con la energía de ese TODO, la parte real de la creación.
El servicio a otros vs el servicio a uno mismo
El camino que decide ver todo lo que existe como una unidad, que reconoce que para crecer individualmente debe ayudar a los demás a crecer, a experimentar, es el camino que llamamos de servicio a otros, y que asociamos a la polaridad positiva. Muchas entidades tienden a escoger este camino, mientras que, por el otro lado, otras entidades escogen el camino que usa las energías de la separación, la contracción, la absorción, pues, como perciben perfectamente, ambos caminos llevan de vuelta a la integración con ese TODO.
Este último camino evolutivo, procede en su crecimiento absorbiendo el potencial de otras entidades, ganando para si mismos, a través del control y la manipulación, el poder de la luz, energéticamente hablando, de esas entidades, mientras el que camino de servicio a otros procede en su crecimiento compartiendo el poder de esa luz, con otros.
Dentro de nuestro nivel evolutivo, en este nivel de la ilusión de la creación en el que estamos ahora, los dos caminos se perciben como “bueno” y “malo”, como positivo y negativo. Pero esto es solo una distorsión en la percepción que tenemos de la verdadera naturaleza de ambos caminos o polaridades. Evidentemente, el camino evolutivo más difícil es aquel del servicio a uno mismo, ya que el constante deseo de controlar, manipular y obtener la “luz” de los demás es tremendamente más extenuante, para la entidad que lo escoge, que el otro. Esta polaridad de servicio a uno mismo llega a su conclusión o fin en el último nivel evolutivo antes de la reintegración con la unidad de la creación, con esa energía del TODO, con la vuelta a lo que es “real”, ya que esa densidad es la llamada de la “unidad”, donde ambas polaridades se reconcilian y se disuelven de nuevo en la vasta energía consciente del TODO.
Caminos paralelos
El camino del servicio a otros sin embargo es mucho más sencillo, con menos dificultades, pues estriba solo en percibir y trabajar siempre ayudando a los demás, para lo cual existen infinitas oportunidades en cada momento. El poder en cada nivel de consciencia de cada entidad que sigue uno u otro camino evolutivo es el mismo, pero su forma de entender el aprendizaje es el opuesto, la una de la otra.
Esta separación de vías, de caminos evolutivos, solo se empieza a marcar a partir de la entrada de una entidad o alma en el nivel evolutivo actual en el que estamos, y se mantiene una vez escogido el camino, en la siguiente densidad, donde se encontrarán mucho más marcadas. Es decir, para poder pasar de tercera a cuarta densidad, debe existir en cada uno de nosotros una elección consciente del camino evolutivo a seguir tras la graduación. Como ya he comentado otras veces, muy pocas personas han escogido hasta ahora CONSCIENTEMENTE el camino de servicio a otros, y muchas menos han escogido el camino de servicio a uno mismo, estando la mayoría de la humanidad sin polarizar, lo cual les llevará a repetir el ciclo actual 3D hasta que conscientemente empiecen a generar y adquirir las experiencias 3D polarizándose por uno u otro camino.
Es por ello que a la tercera densidad se la llama la densidad de la elección, ya que no se sale de aquí sin haber elegido, incorporando energéticamente un camino u otro a nuestro progreso evolutivo. A partir de 4D, aunque aun nos falte mucho porque actualmente estamos camino de un nivel superior dentro de nuestra misma 3D, un nivel que hemos llamado la matrix 15,6 Hz por su frecuencia, ambas polaridades están energéticamente mucho más enfrentadas. Aquellos 4D STO (servicio a otros), poseen unas cualidades diametralmente opuestas en las lecciones del amor que aquellos 4D STS en las mismas lecciones, y no pueden “convivir” juntos, aunque puedan “luchar” bando contra bando cuando la polaridad negativa atenta contra la conquista y conversión de aquellos de polaridad STO hacia la polaridad STS.
Lucha de polaridades
Este tipo de “lucha”, que se percibe en nuestro mundo como manifestaciones energéticas desde los planos no físicos del planeta, hasta que caen en el plano físico en forma de tiempo atmosférico descontrolado, tiene la paradoja de que el bando “STO”, percibiendo en el bando “STS” otra parte de la creación, debe buscar la forma de defenderse de los intentos de polarización negativa sin violar el libre albedrío de las entidades STS que les “atacan”, sin perder su polarización STO.
El otro bando, el STS, concibe la polaridad STO como aquella que debe ser absorbida para poder continuar por su camino, pero cuya vibración positiva representa poco menos que veneno, de ahí que deban manipular sutilmente el libre albedrío de la otra polaridad para poder convertirla a su campo, y así poder entonces absorber su luz.
Lo mismo pasa de cara hacia nosotros, aquellos que existimos en una densidad evolutiva inferior, cualquiera que esté polarizado hacia el servicio a otros presenta un sistema energético cuya energía es “tóxica”, así que todos los intentos y ataques de entidades negativas no son tanto para nutrirse de uno, en la mayoría de los casos, sino para atraerlo al campo STS donde entonces puede ser controlado y manipulado. Este artículo que tenéis aquí explica un poco como funcionan esos ataques y manipulación.
Lo más importante
Así que básicamente, en estos momentos, lo único que cuenta para el salto evolutivo es la elección consciente del camino a seguir para ese salto de realidad por el que estamos transitando, luego simplemente, completar cada uno las lecciones que nuestro Yo Superior nos ha planteado para esta encarnación, y cuando ambas cosas están completas, y fallecemos en nuestra ultima encarnación, entonces la siguiente “vida”, ya nos espera, en el siguiente nivel evolutivo o si todo va bien, el paso «en vida» al mismo.