He visto algo de movimiento y algunas formas de trabajar con la energía para mantenerlas activas. A raíz de esto, me ha parecido interesante compartir un pequeño ejercicio que he aprendido estos días en los cursos que estoy haciendo (recibiendo) sobre proyección astral, ya que están relacionados.
Trabajo con Bioenergías
Las Bioenergías son las energías de nuestro cuerpo. Las irradiamos a través de los poros de la piel y los chakras y las externalizamos formando lo que llamamos holochakra (la suma de las energías de todos los chakras), o cuerpo etérico, o cuerpo vital o capas del aura. Hay mucha nomenclatura diferente. Todos los que hacemos sanación o terapia energética de cualquier tipo, tratamos, con nuestras técnicas, de recomponer, armonizar, desbloquear, sanar, restaurar, etc todas estas energías en todos sus niveles, lo que siempre repercute en una mejora en el plano físico, anímico, emocional, mental de cualquier área de nuestra vida.
El trabajo en uno mismo con estas bioenergías es muy beneficioso, mucha gente se hace sanaciones a sí mismo, o desbloquea sus chakras con visualizaciones o meditaciones, o hace cosas parecidas. El ejercicio que os explico ahora se llama Estado Vibracional, y lo que vamos a tratar de conseguir es poner esas energías internas precisamente a eso, a vibrar, para que se suelten, para que se puedan mover por el cuerpo, para que se desbloqueen.
Acumulando energía
Cerrando los ojos y relajándonos vamos a concentrar nuestro atención en nuestro cuerpo etérico, en la energía que nos recubre físicamente, que podemos notar «en contacto» con nuestra piel. Notamos como existe ese pequeño cosquilleo desde los pies a la cabeza, si focalizamos nuestra atención en una mano, quizás notemos la sensación de calidez que genera la energía de nuestro cuerpo sutil.
Lo que vamos a hacer ahora es, simplemente por el poder de nuestra voluntad, mover y subir toda la energía que podamos a nuestra cabeza, encima de la misma, alrededor del chakra de la coronilla. Vamos a ir subiendo la energía por los pies, piernas, tronco, brazos, etc., hasta acumularla en la cabeza, pensándolo, ordenándolo. Una vez notamos que hemos acumulado parte de nuestra energía en la cabeza, la vamos a mover mentalmente hacia abajo, recorriendo todo el cuerpo, hasta que llega a los pies. La volvemos a almacenar toda en los pies de nuevo, y cuando lo hayamos hecho, volvemos a mandarla hacia arriba, recorriendo todo nuestro cuerpo, sintiendo como esa energía sube.
Instalando el estado vibracional
¿Cómo hacer que toda nuestra energía se ponga a vibrar? Lo que haremos será ir incrementando la velocidad y la intensidad del movimiento de subir y bajar energía desde la cabeza a los pies. Es una cuestión de voluntad. Cada vez más rápido de forma que vayamos arrastrando en cada pasada bloqueos que puedan existir en cualquier parte de nuestro cuerpo al ir pasándoles «la escoba» energética que acabamos de crear. A medida que vamos incrementando la rapidez, notaremos que empezamos a «vibrar», se crean unas vibraciones que no es otra cosa que nuestro cuerpo etérico entrando en una especie de resonancia. Dejemos que sigan esas vibraciones, pues estamos desenganchando energía atascada, bloqueada. Podemos dejar este efecto actuar unos minutos y luego poco a poco hacer que cesen y volver a nuestro estado normal.
Bloqueos y repetición
El ejercicio que os acabo de explicar parece fácil, pero tiene su miga. Conseguir un estado vibracional que sea potente y que haga romper estructuras energéticas estancadas requiere bastante práctica. También será común encontrar bloqueos en varios chakras cuando estemos intentando subir y bajar energía por el cuerpo. Para romper estos bloqueos, hay que «empujar» con voluntad la energía hacia abajo y hacia arriba, para que pueda atravesar el chakra y desbloquearlo. Personalmente en los primeros intentos mi energía «daba un salto» o «se iba por los lados» al llegar al tercer chakra, así que tenía que «obligarla» a pasar por el medio para romper y desbloquear lo que estuviera ahí atascado.
La sensación después de hacer 5-10 estados vibracionales al día (no es broma) es que parece que tus energías fluyen mucho mejor por todo tu sistema, lo cual repercute enormemente como hemos dicho en todos los estados físicos y en nuestro día a día en general. Espero que lo probéis y ya me contareis que tal.