Siempre que hablamos de los caminos evolutivos, hablamos de las dos polaridades que existen, que a pesar de que desde nuestro punto de vista las llamamos “positivas” o “negativas”, en realidad el termino más correcto es el de el camino de Servicio a Otros (STO) y el del Servicio a Uno Mismo (STS).
Cuando llega el momento de pasar de “curso”, es decir, cuando a nivel de Yo Superior vemos que hemos completado nuestro aprendizaje actual, uno se “gradúa” hacia el siguiente nivel evolutivo. En esa graduación se produce una acentuación de la polaridad que se escoge, o se debe escoger (consciente o inconscientemente) en este nivel actual, nuestro 3D.
Amplificando la polaridad
Lo que determina la polaridad de cada uno es su frecuencia o vibración interna, habiendo un cierto tipo de acciones, comportamientos y decisiones que generan o amplifican la “energía” STS o la “energía” STO en cada uno de nosotros.
¿Cómo se crece en una de las polaridades? Si buscamos orientarnos de cara al Servicio a Otros, lo normal es pensar que simplemente “dando” ya estamos haciéndolo bien, pero como en todo, el diablo está en los detalles. Lo primero es que debemos recordar una premisa muy importante del camino STO: nunca se puede violar el libre albedrío de otra persona, en el momento en que lo hacemos, esa acción pasa a engrosar las filas de nuestra energía STS (la intención que haya detrás de la acción es lo que marca la polaridad de la misma). Es un asunto complejo y mal entendido, y nada fácil de poder llevar a la práctica.
Cambiar algo o alguien
Desde nuestra perspectiva actual, cuando nos encontramos con cosas, personas o entidades “negativas” pensamos que podemos ayudarlas o cambiarlas enviando “amor”, “luz” o cualquier tipo de energía positiva. Pero daros cuenta que cuando estamos enviando algo de este tipo, lo estamos haciendo con la intención de cambiar o transformar a esas personas o entidades, porque no aceptamos su polaridad, acción, carácter o lo que sea. Por ello, estamos trabajando contra el libre albedrío de esa persona o de esa entidad que ha escogido un camino “negativo” libremente.
El resultado es que la energía del amor o la luz o lo que sea que estás enviando se convierte en energía que amplifica la polaridad STS del emisor, ya que no cumple con los preceptos básicos del camino de Servicio a Otros y si no ha sido solicitado conscientemente entran en juego las reglas de causa-efecto, acción-reacción hacia el emisor.
El Servicio a Uno Mismo, en cualquiera de sus formas, especialmente en las más sutiles y difíciles de manejar, busca cambiar, controlar y modificar a los demás de acuerdo a la percepción de uno mismo. Es decir, por pensar que esa persona o entidad no es “como queremos que sea” la intentamos cambiar. De hecho, el simple hecho de enviar energía a alguien o algo es un acto de intentar “cambiar” ese algo, lo cual, frecuencialmente hablando, aunque para nuestros estándares sea algo positivo, incrementa como decía la polaridad STS, ya que esa energía no nos ha sido requerida en ningún caso.
Libre intercambio solo cuando es solicitado
Ese es el punto clave de la polaridad STO, dar cuando se nos pide que demos. Lo cual también es algo que tiene miga y es mucho más complejo que lo que parece. ¿Qué constituye una petición de ayuda? A veces una simple mirada de “socorro” es la petición que una entidad STO necesita para poder actuar, una petición formal, una simple frase, un gesto. Pero si no existe esa petición de ninguna de las maneras, actuar por el hecho de “pensar” que estamos “ayudando” o que podemos cambiar o transmutar algo o alguien por las buenas no hace más que cargarnos la mochila de carga “STS”.
Amplificando el nivel STS global
Vivimos en un 3D STS a nivel global, pero cada uno puede escoger polaridad STO a nivel individual si sabe cómo y actúa en consecuencia. Es un tema complicado, de hecho, el dominio STS en nuestro planeta, nuestra sociedad, nuestra cultura, ha potenciando el “dar y dar”, como forma de sentirnos mejor, de pensar que ayudamos, cuando a nivel energético, estamos contribuyendo a mantener la energía STS y el mismo control del cual intentamos escapar, ya que amplificando en nosotros (aunque no lo sepamos) nuestra frecuencia de resonancia hacia la polaridad STS, conseguimos mantener la “polaridad” en el planeta tal y como está ahora.
Solo se amplifica nuestra polaridad STO cuando hay un intercambio acordado, cuando se da, de la forma que sea, tras haber sido requerida nuestra ayuda, cuando no se viola de ninguna de las formas el libre albedrío de ninguna de las partes. Para ello, hay que luchar y romper los condicionamientos sociales que todos tenemos al respecto. En el momento en el que alguien pide algo libremente, y la otra persona lo da también libremente, entonces estamos amplificando la polaridad STO en ambas partes. En el momento en el que una de ellas tiene la intención de cambiar o transformar a la otra parte (lo sepa o no, pues muchas veces no nos damos cuenta de la verdadera razón energética detrás de nuestras acciones) estamos amplificando la polaridad STS.